Eso ha asegurado el presidente de la Asociación de Escoltas en Activo del País Vasco y Navarra en un comunicado en el que señala que los escoltas ven bien el fin de la violencia, aunque advierte que ésta no se ha acabado. Santiago Fontenla, asegura que no descarta una escisión dentro del entramado de ETA, como ocurrió con el IRA y que se puedan producir atentados que “al margen de los posibles acuerdos alcanzados o a la situación de ‘tregua'”.
El presidente de los escoltas considera más que posible esa escisión “capitaneada por elementos jóvenes de la banda que podrían ver en un posible acuerdo, una rendición“, puesto que, como ha recalcado, los integrantes de ETA y su entorno son personas muy radicalizadas, que se mueven en círculos ideológicos cerrados que no permiten la disidencia.
Prueba de ello, continúa, son las “fricciones que han surgido dentro de diversos colectivos del entramado abertzale en Gipuzkoa y Vizcaya, que estarían en desacuerdo con el proceso iniciado recientemente y que se ha visto reflejado el pasado lunes en la Conferencia de Paz de San Sebastián”. Por ello, los escoltas “no bajan la guardia y mantienen el sistema operativo de protección en marcha”.
