En Grecia ha pasado algo que sería inaudito en España: seis miembros del Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK), el partido que gobierna el país, han pedido al primer ministro dimita. No se trata, precisamente de seis militantes cualquiera, sino miembros de la ejecutiva nacional del partido y antiguos asesores del antiguo jefe del ejecutivo Costas Simitis. Entre esas voces está la de la ex ministra y diputada Vasso Papandreu, quien ha manifestado “pido al presidente de la República que reúna a los líderes políticos con el fin de formar un gobierno de unidad nacional para salvaguardar el paquete de ayuda decidido el 27 de octubre y que convoque unas elecciones anticipadas”.
Sus declaraciones se han producido poco después de que la diputada Milena Apostolaki, abandonase el PASOK dejando a George Papandreu a un sólo escaño de perder la mayoría absoluta en el Parlamento. Apostolaki ha decidido salir del grupo del partido socialista por la decisión de Papandreu de convocar un referéndum para que los ciudadanos puedan pronunciarse sobre si quieren aceptar o no la nueva ayuda de la Unión Europea, que supone alrededor de 100.000 millones de euros.
El primer ministro anunció el referéndum este lunes y adelantó que se someterá a una moción de confianza, el próximo viernes para garantizar el apoyo a su política en lo que resta de su mandato que finaliza en 2013. Esta decisión no sólo ha hecho que las bolsas europeas hayan caído a lo largo del día de hoy, sino que ha puesto en entredicho las medidas tomadas en la última cumbre de Bruselas acentuando las dificultades económicas de la UE.