Desde el inicio de la crisis, en 2007, se han destruido 3 millones de empleos y el número de españoles que están en edad de rabajar y no pueden hacerlo es, según la Encuesta de Población Activa (EPA) de 5.126.789. El número de parados seguirá aumentando, nadie lo discute: ni en gobierno saliente, ni el gobierno entrante, ni los principales agentes económicos, ni los organismos internacionales: en el primer trimestre de 2012 el paro llegará al 22,7%, un dato inaudito en la historia española.
A ello se suma que de esos más de 5 millones de desempleados 1.700.000 han agotado todas las coberturas a las que tenían derecho. Esta es la conclusión de un estudio elaborado por UGT, que constata un aumento de casi el 2,5% en el número de beneficiaros de prestaciones por desempleo en octubre con respecto a septiembre.Casi una cuarta parte de estas prestaciones tienen como beneficiarias a personas que fueron despedidas ese mes, un dato al que hay que sumar otro: las altas de prestaciones contributivas registradas en octubre se incrementaron un 14,3% con respecto al mes anterior.
El estudio recalca que la mayor parte de los perceptores de prestaciones por desempleo son hombres, mientras que los más perjudicados por el nuevo repunte son jóvenes de menos de 25 años, con incremento de beneficiarios del 8%. No se acaban ahí las malas perspectivas: la tasa de cobertura por desempleo ha descendido “peligrosamente” en más de 7,2 puntos porcentuales en un solo año,situándose el 60,5%, lo que supone quemás de la mitad de los parados de larga duración han perdido la protección por desempleo.
Para hacerse una idea de la enormidad del problema sólo hay que tener en cuenta una realidad: más de 1,7 millones de desempleados no tiene, en este momento cobertura económica, una situación que, en menos de 6 meses afectará a 2 millones de españoles.
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