El reloj avanza y las posibilidades de encontrar supervivientes del naufragio del Costa Concordia son prácticamente nulas. De hecho, los efectivos de rescate son conscientes de que después de días intensos de búsqueda, si en las próximas 12 y 24 horas no encuentran personas con vida, las posibilidades de hacerlo más adelante dejan de existir.
El último balance de muertos es de 11 personas y siguen desaparecidas otras 20 más. En el momento en que el crucero de lujo encalló iban a bordo cerca de 5.000 pasajeros. Entre los fallecidos hay un mallorquín de 68 años.
El comandante del Costa Concordia, Francesco Schettino, está en el punto de mira por la cuestionable actuación que adoptó tras el accidente. Se le imputa un presunto delito de abandono del buque, homicidio involuntario y naufragio.