“Quiero recuperar la colaboración con el Concello y agradezco la presencia del alcalde en este acto”. Esta fue una de las frases centrales del breve discurso de toma de posesión de la nueva delegada de la Xunta en Vigo. María José Bravo, quien ha renunciado a su acta de concelleira del grupo municipal popular, y que también pedirá una excedencia de su cátedra de Derecho Romano en la Universidade de Vigo, “para dedicarme en exclusiva a este nuevo cometido”, aseguró que el mismo supone un reto “nada fácil”, que asume con intención de llevarlo a cabo teniendo en cuenta las necesidades y opiniones de los ciudadanos.
La nueva delegada estuvo arropada, además de por el presidente de la Xunta, por el conselleiro de Xustiza e Administracións Públicas, Alfonso Rueda, el de Economía e Industria, Javier Guerra, el nuevo delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez, el rector, Salustiano Mato o la presidenta del Consello Económico e Social de Galicia, Corina Porro.
Bravo tuvo palabras de agradecimiento para sus compañeros en el Concello, para el presidente Feijóo y un recuerdo especial para sus padres, “que han fallecido hace poco y que, seguro estarán con don Manuel Fraga hablando sobre cómo puedo realizar mi trabajo”.
Por su parte, el presidente de la Xunta destacó la trayectoria de la nueva delegada y subrayó que no concibe otra manera de formar equipos que contando con los mejores profesionales, categoría en la que incluyó a su nueva representante en Vigo a la que auguró una excelente gestión,.
