“Por desgracia, las cifras de empleo no van a mejorar a corto plazo, sino que empeorarán en el año 2012”,así lo ha asegurado el presidente del Gobierno en su comparecencia de este miércoles ante el Congreso de los Diputados para explicar los acuerdos de la última cumbre europea. Mariano Rajoy adelantó que ya no esperará más a patronal y sindicatos y que este mismo viernes el Consejo de Ministros aprobará una “reforma laboral amplia, profunda y equilibrada”. Su intención, ha recalcado, es que la misma sea “útil para la consecución de clima que favorezca la competitividad, la contratación y el empleo estable”.
Rajoy ya sabe que la reforma que aprobará el Gobierno puede costarle una huelga general, como ya se le oyó decir a micrófono abierto durante la última reunión de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE, algo que en parte ya se llevará a cabo en Galicia, donde la CIG ha aprobado hacer una convocatoria a un paro general.
¿Qué se puede esperar de las medidas laborales del Ejecutivo? Lo que se sabe lo han adelantado los ministros de Empleo, Hacienda y Economía: unificación de todos los contratos en dos tipos, una indefinido y otro a tiempo parcial para quienes buscan su primer empleo; reducción de las indemnizaciones por despido, que podrían pasar a 20 días por año trabajado; límite a la negociación de los convenios colectivos, que dejarían de ser por sectores y de ámbito nacional, para circunscribirse casi a cada empresa y moderación salarial, algo que sí ha sido pactado por la empresarios y centrales sindicales.