Supeditado al correspondiente impacto ambiental que dicho aumento de velocidad tendría, el caso es que el Gobierno de Mariano Rajoy está “abierto” a estudiar un posible incremento de los limitados 120 kilómetros por hora en autovías y autopistas.
Así lo dijo hoy el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, que, en el caso de salir adelante esa subida de la velocidad tope permitida, se trataría sólo de un ligero incremento que, en su opinión, no tendría tanta incidencia en las cifras de siniestralidad.
Según datos del departamento de Interior el 75% de los accidentes mortales se registran en accidentes secundarias, no en autovías y autopistas.