Es lo dicho hoy oficialmente por el Gobierno cubano, a través del vicepresidente del Consejo de Ministros, Marino Murillo, en una inusual rueda de prensa con periodistas no sólo locales, sino también extranjeros.
Aprovechando la visita de 3 días que está llevando a cabo en la isla el Papa Benedicto XVI, el Ejecutivo cubano ha querido dejar claro que, si bien, se actualizará todo lo que tenga necesario del modelo económico socialista, en cuanto al tema político, nada de nada, todo seguirá igual.
Según este representante autorizado del Gobierno de la isla, en Cuba sólo se están acometiendo algunas reformas que tienen que ver con la apertura económica, pero si alguien cree que esas reformas irán seguidas de cambios políticos están equivocados.
Después de 54 años de Revolución cubana, sólo tímidas reformas como la implantación de cuentapropistas -trabajadores autónomos- o la libertad a la hora de comprar o vender propiedades se han ido aplicando de forma progresiva.