Ni es la primera ni será la última vez que se da una situación similar. Ahora fueron dos actores los que decidieron no regresar a Cuba aprovechando un viaje institucional a EEUU para presentar la película “Una noche”, pero existe una larga lista conformada por deportistas, cantantes o médicos, sólo por citar algunos.
Cuando esto ocurre, es decir, que un ciudadano cubano no regresa a la isla en el tiempo estipulado se convierte automáticamente en desertor y el régimen castrista comienza a aplicar una especie de castigo que puede durar años o, incluso, para siempre.
Todo depende a lo que te dediques. Para el Gobierno cubano no es lo mismo que esa deserción la cometa un médico o un físico -entienden que es una fuga de cerebros– o un deportista o artista. Seguramente que esos últimos podrá regresar mucho antes a Cuba que el primero que, directamente, lo tendrá prohibido durante mucho tiempo.
El episodio más reciente de cubanos que no regresan a casa tiene como protagonistas a dos jóvenes actores de 20 años. Se llaman Anailín de la Rúa y Javier Núñez Florián que no volvieron a verse con la delegación que viajó a Nueva York y, por tanto, no regresaron a Cuba.
Paradojas de la vida, la película presentada en EEUU relata la historia de varios jóvenes que deciden construir una balsa e salir por mar de la isla.
