Nadie se movió de la Praza de América las más de cuatro horas que se hicieron esperar los flamantes jugadores de Primera. Más de 60.000 personas abarrotaban la plaza y otras 40.000 esperaban los autobuses en su recorrido desde Balaídos, en donde una afición desatada aguardaba la llega de los ‘héroes celeste’. Pasada la medianoche y escoltada por la Policía Local, la plantilla se subió por fin al escenario y As Travesas se vino abajo.
Los chicos de Paco Herrera dieron un auténtico recital con las canciones que cada domingo le dedica la afición, y se ‘acordaron’ de sus rivales del Deportivo a los que dedicaron gritos como ‘Deportivista el que no bote’, ‘La casa de Lendoiro es un puticlub’ o ‘El único Deportivo es el Alavés’, que fueron coreados por sus incondicionales.
Yoel, Sergio, Hugo Mallo, Iago Aspas, Orellana o De Lucas, fueron cogiendo el micrófono por turno y pidiendo aplausos para la afición, para sus compañeros, el presidente, ‘El único Mouriño no es portugués’, y el entrenador, Paco Herrera quien, emocionado dedicó el triunfo a la afición, “os lo debíamos y ahora os lo hemos pagado”.
Los jugadores, ataviados con banderas de Galicia, con las de los Celtarras, pañuelos en la cabeza, bufandas y cervezas en la mano, advirtieron a los que serán sus nuevos rivales la próxima temporada, ‘¡Barça, Madrid, el Celta ya está aquí!’. De ahí se pasó a la invitación a que la juerga siguiese, ‘Esta noche Vigo se va de movida’, antes de despedirse de la ciudad hasta este lunes en el que repetirán el baño de multitudes, con recepción oficial en el Concello…en ella ya no estará Gonzo, el popular presentador de El Intermedio, aunque sí puede que Gudelj, para quien tuvieron un cariñoso recuerdo, lo mismo que para el único gallego que ha ganado el Tour de Francia, Óscar Pereiro.
