Es lo que están proponiendo desde la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME) para que el Gobierno de Mariano Rajoy desestime la idea de quitar a los profesionales del Ejército la paga extra de Navidad, tras anunciarlo el presidente este miércoles.
Según el secretario general de AUME, Mariano Casado, el Ejecutivo central podría optar por suprimir todos los actos y celebraciones militares que supongan gastos superfluos con cargo al presupuesto, con lo que dicha paga extraordinaria no desaparecería.
Pese a reconocer que la situación actual de España es complicada, Casado lamentó que no se prescinda de organizar esas celebraciones, en algunos casos muy costosas como, por ejemplo, despidos de oficiales, homenajes a los santos patronos o condecoraciones y ascensos.
“Todo esto tiene que desaparecer”, señala el este responsable de AUME, ya que son “gastos superfluos”.
Otras de las ideas de AUME son racionalizar el uso de coches oficiales, revisar los desplazamientos aéreos o replantear quiénes han de tener derecho a vivienda de cargo.