El presidente del Congreso de los Diputados no oyó el “¡que se jodan!” de la diputada popular Andrea Fabra y, por eso no le llamó la atención. Jesús Posada, que no ha aclarado si tampoco ha visto el vídeo en el que la hija de Carlos Fabra pronunciaba esta frase (presidente, puede verlo usted pinchando aquí), o si ha leído que la propia Andrea ha admitido dichas palabras o si se ha asomado a las redes sociales para comprobar la repercusión de las mismas, ha manifestado que sopesará el asunto.
En concreto se refiere a los escritos presentados por los grupos parlamentarios del PSOE e Iniciativa per Catalunya (ICV) que instan a Posada a tomar medidas contra la diputada del PP por Castellón. Sí se sabe ya que el Partido Popular no lo hará, ayer lo ratificó su secretaria general, Dolores de Cospedal, para quien, pese a que su comportamiento “es censurable y un mal ejemplo para los ciudadanos”, es algo habitual en el Parlamento, como puede verse en otros grupos.
De la misma opinión que Cospedal es la ex ministra de Aznar y vicepresidenta del Congreso, Celia Villalobos, quien ha declarado que la actitud de Fabra “no nos parece la más afortunada, pero ni a ella misma“, al tiempo que ha recordado que ha vivido episodios de esta clase en los que incluso se han llegado a proferir insultos como “asesinos”.
