Las posibilidades de que Ecuador conceda asilo político al fundador de Wikileaks, aumentan. El presidente de aquel país, Rafael Correa, tras calificar a Julian Assange como “defensor de la libertad de expresión”, ha asegurado que su Gobierno está valorando tomar una solución “solidaria y soberana” sobre la petición de asilo de Assange, que lleva un mes encerrado en la embajada ecuatoriana en Londres.
“Vamos a consultar lo que sea necesario, a valorar con quien quiera, pero a tomar una decisión absolutamente solidaria y soberana, en función de los principios humanistas que dominan en nuestra revolución y en nuestra Constitución“, ha dicho el presidente Correa.
El abogado del periodista ha agradecido a Ecuador su apoyo frente a las acusaciones de abuso sexual, a las que Assange tendrá que hacer frente ante la justicia sueca, lo cual, finalmente podría suponer su extradición a los Estados Unidos, donde se enfrentaría a acusaciones mucho más graves como la de espionaje que, en el peor de los casos, podrían suponer una condena a cadena perpetua.