Echando balones fuera. Así se mostró esta mañana el ex presidente de Bankia, Rodrigo Rato, durante su comparecencia en el Congreso para explicar su gestión al frente de la entidad nacionalizada. “Actué correctamente” afirmó el también ex ministro en tiempos de José María Aznar y ex director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Rato reconoció que su dimisión vino motivada por desavenencias con el Gobierno y que fue el ex presidente del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, quien le instó a incorporar a Bancaja a la fusión de cajas que culminó después con la creación del banco.
A lo largo de 3 horas, el ex presidente de Bankia -siguiendo el ejemplo de su antecesor en el mismo asiento, Julio Fernández Gayoso– no entonó en ningún momento su ‘mea culpa’ sosteniendo que la responsabilidad de lo que ocurrió con la entidad no fue por sólo suya y de su equipo, sino muy mucho del Banco de España, encargado -junto a la empresa Deloitte– de auditar la cuentas de Bankia.
Según relató Rato, fue el propio Fernández Ordóñez el que un día le convocó a su despacho para tranquilizarle por la situación de Bancaja y le conminó a fusionarse con ella, con la presencia además del presidente José Luis Olivas.
Sin referirse ni un sólo momento a la colocación de preferentes entre un número importante de clientes de Bankia, Rato insistió en que hizo “lo correcto” en todo momento y que trabajó con todo su esfuerzo en “el peor escenario económico imaginable”.
