Sólo el descenso de las temperaturas que está previsto para las próximas horas podría ayudar al incendio que sigue avanzando en la isla canaria de La Gomera. Y es que, después de dos día arrasando ya más de 3.000 hectáreas, el fuego continúa estando totalmente descontrolado y dos focos preocupan y mucho.
No se ha podido hacer nada y las llamas ya están desde ayer en el Parque Nacional de Garajonay y el barranco de Benchijigua. No se descarta seguir desalojando más vecinos, después de que unos 600 tuvieran que abandonar sus casas en los núcleos de población más cercanos a las llamas.
Asimismo el incendio desatado en La Palma también continúa, aunque, afortunadamente, ya está perimetrado. Este fuego ya calcinó unas 1.000 hectáreas.
Por cierto que el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, se ha quejado públicamente por el retraso de los hidroaviones y aprovechó para reclamar una base permanente en la isla para luchar contra los futuros fuegos.
