Que Angela Merkel es una persona ‘non grata’ y que no iba a ser bien recibida en Grecia era algo más que conocido, pero también que se podían producir grandes incidentes entre los manifestantes y la Policía. Pues cuando la canciller alemana todavía no se ha ido del país heleno, ya han empezado a protagonizarse graves altercados.
De hecho, en las últimas horas la Policía griega ha lanzado gases lacrimógenos contra algunos manifestantes que han comenzado a tirar piedras y otros proyectiles en el centro de Atenas, donde miles de personas se han congregado para protestar contra la visita de una de las dirigentes que más quebraderos de cabeza les está dando.
Pero antes de esos gases lacrimógenos, los concentrados han recibido también granadas aturdidoras y aerosoles de pimienta en plena plaza Sintagma, junto al Parlamento griego.
La Policía ha detenido a decenas de manifestantes y en la zona siguen desplegados unos 6.00 agentes. Varios medios de comunicación del país griego cifran en más de 80.000 los griegos que han salido a la calles para rechazar esta visita de Merkel.
Por cierto que las palabras institucionales de Merkel tampoco han sido bien recibidas por los griegos. Con respecto a los grandes recortes que están padeciendo allí, la canciller les recordó que los desafíos económicos no se pueden solucionar “de la noche a la mañana” y que a otros países que han tenido problemas “les ha llevado décadas levantarse”.
Para Merkel no existe ninguna solución que sea “la panacea” y reconoció que los griegos tienen un camino por delante “duro y difícil”, aunque confía en que con el esfuerzo encaminado saldrán de la dura situación por la que atraviesan.