No necesita abuela, para elogios ya está ella misma. Hablamos de la ex presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, quien este martes no dudo en hacer la pelota a su nuevo jefe, el presidente de la empresa privada que la ha fichado, del que dijo que “es tan buen cazacerebros que me ha fichado a mí”.
Son sus primeras declaraciones tras conocerse que abandona su puesto de funcionaria para incorporarse como asesora a Seeliger y Conde, una empresa dedicada a la caza de talentos.
Preguntada sobre su compatibilidad como presidenta del PP madrileño y su trabajo en la empresa privada, Aguirre aseguró que la política “no puede ser una profesión”, sino que se trata de “un servicio público y, como tal, temporal” y que, quizás en su caso, ha estado demasiados años en política.
Según la popular, a la política “deben ir temporalmente los mejores” y dijo que tras dedicarse 37 años a la vida pública, ahora con 61 años le apetece cambiar y “ganarse la vida en la empresa privada”.