La polémica suscitada es lo que llevó a abortar la sesión de ‘body sushi’ que había anunciado a bombo y platillo un restaurante de Vila-Real (Castellón).
Se trataba de una sesión culinaria que tenía previsto celebrar en sus instalaciones y que consistía en ir degustando sushi no en los platos tradicionales, sino en cuerpos desnudos de mujeres.
La Consejería valenciana de Bienestar Social llegó a recibir, a través del Observatorio de Publicidad No Sexista, unas 140 denuncias de particulares y entidades en contra de esta iniciativa.
Antes de que el restaurante confirmara que no iba a celebrar tan diferente sesión de sushi, la Consejería de Bienestar Social le envió una carta recomendándole que suspendiera la sesión al considerar que esta práctica atentaba contra la dignidad de la mujer.