Sigue sin haber acuerdo en la negociación del convenio colectivo entre la patronal y los trabajadores de las ambulancias y nuevamente desde la Federación Gallega de Empresarios de Ambulancias (FEGA) denuncian distintos daños en una docena de vehículos del transporte sanitario de Vigo, Oleiros y Cambre.
Según una nota de prensa enviada por la FEGAM, “estos hechos se producen días después de que un miembro del comité de huelga, de CCOO, animase a los trabajadores a endurecer las medidas de presión y a que éstas tengan lugar todos los días de la semana, y no sólo jueves y viernes”, que, recuerdan, son las jornadas oficiales de huelga.
Estos nuevos episodios “vandálicos”, según califican desde la FEGAM, tuvieron lugar en Cambre y Oleiros, donde aparecieron dos ambulancias pintadas y tres vehículos con las ruedas rajadas, y en el caso concreto de Vigo, donde pincharon las ruedas de otras siete ambulancias.Los empresarios ya han presentado la pertinente denuncia ante la Policía Nacional.
Desde la FEGAM aseguran que el único obstáculo para que se firme el convenio 2013/2014 es la exigencia por parte de los agentes sociales de incluir una tercera paga extraordinaria. Así, recuerdan que en pasados encuentros en el Consello de Relacións Laborais, la patronal ya dejó claro que esa petición es inasumible económicamente e intentó por todos los medios llegar a un acuerdo que garantizase la paz social en el transporte sanitario en los dos próximos años. Para lograrlo, propuso una subida anual del 1% y el mantenimiento de todos los puestos de trabajo, unos 1.400.
El sector considera que los agentes sociales deberían explicar a la opinión pública por qué en el contexto económico actual rechazan la oferta de la FEGAM y se dedican a intentar sabotear cualquier posibilidad de pacto.
Asimismo, recuerdan que el importe del contrato con el Sergas está congelado desde 2008 debido a la crisis, y que los costes de explotación de las empresas han aumentado considerablemente en los últimos años. No obstante, y a pesar de esta circunstancia, los trabajadores no han cobrado menos, sino que han visto mejorado su salario en un 8%.
