Lo acaba de anunciar el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante el que está siendo su primer Debate sobre el Estado de la Nación desde que llegó a la Moncloa, hace ahora un año y tres meses. Según sus palabras, a partir del próximo año 2014, existirá un régimen especial en el IVA por el cual tanto las pymes como los autónomos no tendrán que adelantar este impuesto sin haber cobrado antes la factura correspondiente.
La medida desvelada, que provocó aplausos entre sus colegas de la bancada del PP, se aplicará a aquellos autónomos y pymes con un volumen de negocio inferior a los 2 millones de euros.
Su discurso, centrado totalmente en la crisis económica, sirvió para que Rajoy asegurara que la principal preocupación del Ejecutivo que dirige sigue siendo el paro y que hará todo lo que esté en su mano para “darle la vuelta” al “drama” del desempleo.
“Nada de brotes verdes ni nubes pasajeras ni anticipos primaverales. La realidad social y económica de nuestro país es terriblemente dura y sobre es base tenemos que cimentar nuestras actuaciones”, argumentó el presidente, al tiempo que avanzó que este mismo viernes, en Consejo de Ministros, aprobará un decreto ley con medidas de choque de promoción de empleo.
Entre dichas medidas, 45.000 millones de euros para mejorar la situación de las empresas, sobe todo, de las pymes. Así explicó Rajoy que se ampliarán las líneas ICO para que el instituto movilice 22.000 millones este año.
Tras reconocer una vez más que no ha podido cumplir la mayoría de sus promesas electorales con las que concurrió el 20 de noviembre de 2011, Rajoy volvió a decir que no le ha quedado más remedio que adoptar medidas dura para evitar el “naufragio que amenazaba nuestro país”.
Aprovechó su comparecencia, además, para informar que el déficit público se situó por debajo del 7% del PIB en 2012, lo que supuso un recorte de 21.000 millones de euros, frente al objetivo del 6,3% acordado con Bruselas.
A la espera de las cifras definitivas, durante el pasado año se habría reducido el déficit en 21.000 millones de euros, la mitad por los mayores ingresos y la otra mitad por el recorte del gasto, aunque subieron las partidas dedicadas a las prestaciones por desempleo y al pago de los intereses de la deuda.
