Eso es lo que asegura el alcalde quien ha recalcado que el contrato que prorroga la concesión de Aqualia hasta 2020 dice que “los 20 millones que se destinarán a obras de mejora en el saneamiento y abastecimiento no repercutirán en el recibo”. Sin embargo esto no coincide con el informe del interventor municipal, esgrimido por la oposición, cuyo portavoz calificó a Abel Caballero de mentiroso.
El alcalde repitió que la inversión por parte de la concesionaria “no será a costa de incrementos adicionales” en el recibo y arremetió contra el portavoz municipal del Partido Popular al que pidió que deje su cargo ante “esta calumnia, esta falsedad y otra mentira”. Para demostrar que lo que decía era cierto, Caballero enseñó el contrato de concesión firmado en 1999 y la ampliación de dicha concesión correspondiente a 2012 recalcando que “sus condiciones de tarifa son las mismas”.
Sin embargo estas explicaciones no han convencido a la oposición. Su portavoz insistió en pedir explicaciones al alcalde, “que solo se ha limitado a insultar, que es lo que hace cuando no tiene un argumento para responder a la oposición”. El portavoz popular indicó que “este asunto huele mal y no es más que otra estafa a los ciudadanos”, recordando que el Pleno del Concello aprobó, hasta en cuatro ocasiones el cambio de tarifa en el suministro del agua para que los ciudadanos paguen “por lo que consumen” y no una cantidad fija “usen el agua o no”.
