Unos 200 delegados de la CIG ocuparon esste jueves la sede de la Confederación de Empresarios de Pontevedra (CEP), ubicadas en la calle García Barbón de Vigo, para reclamar que se reactive la negociación colectiva y que de no hacerlo supondrá que unos 400.000 trabajadores pierdan derechos laborales y poder adquisitivo.
Desde el sindicato nacionalista de lamentan que la patronal sigan poniendo obstáculos en esa negociación.
Los concentrados en las instalaciones aprovecharon, además, para entregar una carta dirigida al presidente de la CEP, José Manuel Fernández Alvariño, en la que instan a los empresarios en general a reconsiderar su actitud y reanudar esos acuerdos, hasta ahora paralizados.
Por cierto que este acto de protesta se enmarca en las acciones con motivo del 10 de marzo, Día da Clase Traballadora Galega.