Miles de personas han salido a las calles de Tokio para pedir al Gobierno que abandone la energía nuclear a pocas horas de cumplirse el segundo aniversario de la crisis de la planta de Fukushima por el terremoto y posterior tsunami que arrasaron la costa este de Japón el 11 de marzo de 2011.
Coreando ‘Protejamos a nuestros hijos, paremos la energía nuclear’, casi 200.000 personas han pedido que no se olvide la crisis de la planta, que dejó sin hogar a más de 90.000 familias que, a día de hoy, no pueden volver a ninguna de las casas situadas a menos de 30 kilómetros de la central algo que, según varios manifestantes, “está empezando a ser olvidado por la opinión pública y por los medios de comunicación”.
La operadora de la planta, la Tokio Electronic Power Co. (TEPCO) tiene por delante décadas de trabajo de limpieza para eliminar la radiación expulsada al ambiente en los días posteriores al terremoto. Actualmente se encuentran en funcionamiento solo dos de los 50 reactores nucleares del país para garantizar un mínimo de suministro energético en el caso de cortes durante el verano.
Una reciente encuesta ha revelado que un 70% de los japoneses quieren eliminar la energía nuclear, algo que descarta el nuevo primer ministro, Shinzo Abe, quien se ha planteado reactivar los reactores desconectados tras el seísmo siempre y cuando cumplan nuevas y más exigentes medidas de seguridad.
Junto a la manifestación de Tokio se están preparando más de un centenar de protestas similares en otros puntos del país, según los medios nacionales, que se prolongarán hasta mañana lunes, la fecha del aniversario.