Como se esperaba, la única votación que se ha celebrado este martes, apenas tres horas después de empezado el Cónclave que debe de elegir al sucesor de Benedicto XVI, ha sido infructuosa. Los 115 cardenales que están en la Capilla Sixtina, no han dado la mayoría de dos tercios, 77 votos, a ninguna de sus eminencias.
No ha habido sorpresas. Benedicto XVI fue elegido en la cuarta votación, mientras que Juan Pablo II necesitó el doble. Solo un Papa fue elegido el primer día del Cónclave, Pío XII, en 1939…eso sí, necesitó tres votaciones para ello.