Ya sabemos por qué el nuevo Papa eligió llamarse Francisco y ser el primero de la historia en llevar este nombre. Decidió hacerlo en un homenaje a San Francisco de Asís, dedicado una buena parte de su vida en el siglo XII a los más pobres.
“¡Cómo me gustaría tener una Iglesia pobre y para los pobres!”, clamó este sábado el sucesor de Benedicto XVI ante los 6.000 periodistas acreditados en el Vaticano y que cubrieron todo el desarrollo del cónclave que le eligió el pasado miércoles, día 13.
Precisamente sobre ese cónclave papal, el sucesor de San Pedro en la tierra explicó que cuando se dio cuenta que los votos a su favor iban subiendo tenía a su lado al al arzobispo emérito de Sao Paulo (Brasil), Claudio Hummes, quien le dijo: “No te olvides de los pobres”.
Según el hasta ese día cardenal Jorge Mario Bergoglio, esta frase es la que le llevó a pensar en San Francisco de Asís y ya no tuvo ninguna duda de que llevaría su nombre de pila para su Pontificado.
Pero durante su discurso, el Papa también dijo que hay que volver a colocar a Cristo en el centro de la Iglesia católica: “Cristo es el centro, la referencia fundamental, la referencia de la Iglesia”.
