Se calcula que Rusia cuenta con una población de de unos 147 millones de habitantes, pues, según un informe, casi un tercio de ellos, es decir, 37 millones de sus ciudadanos consideran que los homosexuales necesitan ayuda psicológica, mientras que 7 millones más son partidarios de que las minoría sexuales sean liquidadas.
Pero la investigación sociológica liderada por el Centro Levada deja otros datos como que el apoyo al matrimonio entre personas del mismo sexo descendió de manera importante en los últimos tiempos. De hecho, el 85% de los rusos se muestran totalmente en contra del matrimonio homosexual.
Asimismo, dos tercios de los rusos aseguran que tendrían un disgusto mayúsculo si descubrieran que sus hijos o nietos son víctimas de la propaganda homosexual, normativa que fue prohibida el pasado mes de enero.
Se trata de una nueva ley rusa que propone sancionar con multas en metálico la promoción de los comportamientos homosexuales.
Que en Rusia existe un gran rechazo a la homosexualidad le llevó a este país a hacerse con el dudoso honor de ser de los lugares europeos donde menos se respetan los derechos de los homoxesuales y lesbianas. Fue, precisamente, la Asociación Internacional de Gais y Lesbianas quien le concedió en 2012 ese premio.
En Rusia hasta 1993 estuvo vigente el artículo 121 del código penal de la antigua Unión Soviética que sancionaba con penas de cárcel las prácticas homosexuales. Sólo dejó de considerarse una enfermedad mental hace dos décadas.
