Investigadores del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM), de Barcelona, han identificado una nueva función de la proteína IkBa clave en el desarrollo del carcinoma escamoso, el segundo cáncer de piel más frecuente, lo que ofrece una nueva herramienta diagnóstica para la enfermedad y, en un futuro, permitirá detectar dianas terapéuticas para tratar este cáncer.
Cada año se diagnostican más de 250.000 nuevos casos de este tumor, que aparece en las células escamosas que forman las capas superiores de la piel y puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, siendo más común en las áreas más expuestas al sol.
El estudio se ha publicado en la revista ‘Cancer Cell’ y, según ha explicado el autor principal del mismo, Lluís Espinosa, la proteína “regula directamente la actividad de los genes implicados en la diferenciación celular y en el desarrollo del cáncer”.
Hasta ahora se conocía la función de la proteína IkBa en el citoplasma donde inhibe la vía NFkB, un complejo proteico implicado en la respuesta inmune de las células. Ahora se ha descubierto que en el núcleo de los queratinocitos, las células típicas de la piel, y en el núcleo de los fibroblastos, hay una forma diferente de IkBa resultado de su unión con otra molécula llamada Sumo, dando lugar a la proteína Sumo-IkBa que había sido previamente identificada por otros grupos pero se desconocía cuál era su función.