Efectivos desplazados para combatir el fuego que se declaró en la parroquia de Vincios, pasadas la 1 y media de esta madrugada, siguen trabajando en la zona y han realizado tareas de refresco de la zona próxima al monte Galiñeiro para impedir que las llamas que fueron apagadas en esta parte puedan reactivarse.
La situación, fue especialmente grave durante esta noche, durante la cual las llamas se extendieron – ayudadas por el viento – casi sin control, pese a la salida de los vecinos y de los medios de extinción terrestres. El fuego, que empezó a ser combatido con medios aéreos desde primera hora de esta mañana, pudo ser controlado, en un principio, por tres agentes forestales, nueve brigadas, cinco motobombas y una pala y, a partir de las 7 con los medios aéreos, entre ellos varios hidroaviones y helicópteros.
A la hora de redactar esta información, el fuego, que ha arrasado más de 20 hectáreas, en su mayoría de monte bajo, ya está controlado y las llamas afectan a una pequeña parte del monte, en el que siguen desplegados los dispositivos antiincendios.