El alcalde de As Neves, Raúl Emilio Castro, y los concejales del equipo de gobierno, tuvieron que salir escoltados del Concello, este martes, después de que tuviera que suspenderse un pleno extraordinario, convocado para tratar, monográficamente, sobre la situación de los afectados por la compra de Preferentes.
El mismo transcurrió con normalidad – con la intervención de los diferentes grupos municipales y los afectados – hasta que llegó el momento de votar las diferentes mociones. Durante el debate, el portavoz del BNG, Xosé Manuel Rodríguez, propuso en el nombre de su grupo que la corporación nevense consensuase una postura conjunta de apoyo a los afectados, rechazar las quitas, abogar por la devolución del 100% del dinero, la derogación do decreto 24/2012, “que limitó la capacidad de los afectados para recuperar sus ahorros” , o secundar una manifestación delante de la sede central de Novagalicia Banco, en Vigo, “a la que se sumaría la Corporación como gesto de apoyo a los ahorradores”.
Por su parte, los afectados, por medio de su portavoz, Xulio Vicente, rechazaron que las plataformas de afectados persiguiesen algún fin político, “estoy dispuesto a que cualquier alcalde del Partido Popular que asuma nuestras reivindicaciones sea nuestro portavoz”, aseguró, al tiempo que recordó que llevaban dos años luchando “por lo que es nuestro”, en la calle. Vicente recriminó que en este tiempo “no tuvimos el apoyo de los responsables públicos que estaban más cerca: los concejales de los distintos concellos donde vivimos las víctimas de este robo” y aseguró que eso era así porque “porque no os dejan, no os deja Louzan – en referencia al presidente de la Diputación –“ y repitió que “si todos los alcaldes del Partido Popular se pusiesen del lado de los estafados, esto ya se habría solucionado”.
Los afectados recordaron que dos años antes, “cuando nos habían robado a los más de 70.000 afectados más de 1.800 millones de euros, muchos decían que no había nada que hacer, qué de donde se iba a sacar ese dinero…y ya se pagaron 1.200 millones…y eso pese a que nos habéis dado la espalda…¡si se cobraron fue porque no dejamos de reclamar lo que es nuestro!”.
Vicente concluyó pidiendo al alcalde que firmase sus peticiones, pidiendo que dejase libertad a sus concejales para hablar, “porque más de uno está de acuerdo con lo que estoy diciendo” y advirtiendo, “tenéis que estar con nosotros, sino seréis colaboradores y cómplices de un robo”.
El alcalde replicó indicando que “no soy amigo del aplauso fácil” y reivindicando la labor hecha por muchos alcaldes, “sea cual sea el partido al que pertenezcan”. Raúl Emilio Castro señaló que “todos llevamos un año trabajando cada día para solucionar este problema…puede que el sistema de arbitraje no fuese el mejor, pero el trabajo del Partido Popular es innegable”. Castro recordó que “el PP gana elecciones porque los ciudadanos le votan” y se mostró dispuesto a votar el apoyo a la vía del arbitraje, a que se devuelva el 100% de su dinero a los afectados, que la Administración asuma los gastos que causen los juicios de quienes aún no hayan recuperado su dinero y de transmitir estos acuerdos a los organismos públicos que pueden hacerlos posibles.
Fue en ese momento cuando empezó a aumentar la tensión. Los afectados aseguraron que estaban “cansados” de tantos papeles y exigieron a los concejales que se dejasen de “paripés” y que apoyasen sus demandas, “no se olviden que mintieron para ganar las elecciones en Galicia prometiendo que si gobernaba el PP nos devolverían todos nuestros ahorros…si llegan a decir que de los 70.000 afectados solo cobrarían 36.000 no los hubiese votado nadie”. Además, acusaron a los populares de crear un arbitraje “que no se sabe qué criterios sigue y que beneficia, antes que a nadie a los miembros de su partido atrapados en las Preferentes, como en O Rosal…allí el primer afectado en cobrar fue un concejal del PP…aún estamos esperando a que nos dé las gracias” y mencionaron el acuerdo de los ’11 alcaldes’ reunidos en Mondariz, “firmaron un papel del que no se cumplió nada…ya no valen más papeles, están con los estafados o en contra, no hay más”.
La situación estalló finalmente cuando se sometió a votación la propuesta del Bloque, que fue rechazada por los representantes del Partido Popular. En ese momento, los afectados clamaron, en medio de gritos de “’¡sinvergüenzas!, ¡corruptos!” que le hubiesen dado la espalda, cerraron la puerta de acceso al salón de plenos y achacaron, en medio de un alboroto, a los representantes del gobierno local que no hubiesen querido comprometerse y que el alcalde no hubiese dejado libertad de palabra y de voto a sus concejales, “ese cantamañanas que está ahí – dijo Xulio Vicente al alcalde señalando a unos de los concelleiros populares – hace unos días nos dijo que estaba de acuerdo con nosotros en todos y ahora viene aquí y vota lo que le mandan y ni abra la boca”.
Finalmente, el equipo de gobierno pudo salir de la sala tras el despliegue de hasta 15 agentes de la Guardia Civil, que entraron en el Concello y escoltaron a los concejales hasta el coche del alcalde en el que abandonaron el lugar.