Lo han hecho posible los votos de su partido en el Parlamento de Galicia. Gracias a ello, Manuel Díaz Capón – quien en julio afirmó que quienes fueron condenados a muerte durante el franquismo “será porque lo merecían” – no tendrá que dimitir. El Partido Popular votó en contra de la iniciativa del BNG – que fue apoyada por los socialistas y Alternativa Galega de Esquerda (AGE) y su portavoz, Paula Prado, justificó dicho voto asegurando que “el único fascismo que conozco en España, en los últimos 40 años, es el de Batasuna, el de ETA, y me gustaría que ustedes lo condenaran”. Prado añadió, refiriéndose a BNG y AGE que “no van a darnos lecciones de democracia partidos que respaldan a condenados por terrorismo” y formuló otra petición, “censurar todos los discursos totalitarios que tienen víctimas a su espalda, como el comunismo”.
En este punto, la diputada del Bloque Ana Pontón se mostró favorable a añadir este extremo a su propuesta, a fin de sacar a votación tanto la reprobación del regidor de Baralla como la condena a cualquier régimen totalitario, algo a lo que se negó Paula Prado, puesto que su compañero de partido ya hizo “una rectificación pública”.