Al menos seis personas han muerto y alrededor de otras 70 han quedado atrapadas entre los escombro de un edificio de cinco pisos que se ha derrumbado en Bombay, una ciudad del oeste de la India. Los servicios de emergencias trabajan a marchas forzadas para rescatar al mayor número de víctimas posible, la mayoría residentes del inmueble de 22 familias distintas que se encontraban durmiendo en el momento del desplome del edificio, que se produjo poco después de las 06.00 horas.
El inmueble, de 30 años de antigüedad, había sido clasificada como C-2, lo que implicaba que necesitaba reparaciones urgentes. Este tipo de incidentes son frecuentes en el país, donde la construcción de los edificios es habitual que se realice con calidades de poca calidad, de forma incorrecta o saltándose incluso la legislación vigente. De hecho, el pasado mes de junio al menos cuatro personas morían y otras seis resultaban heridas al derrumbarse un edificio también de cinco plantas en la misma ciudad.