El Tribunal Supremo decidirá esta semana el futuro de la cláusula suelo. A lo largo de estos días, el tribunal tendrá que pronunciarse sobre el recurso de nulidad que interpusieron BBVA y Cajamar contra la sentencia que anulaba las cláusulas suelo en los casos en los que su ejecución no fuera lo suficientemente claro. En caso de posicionarse a favor, las cláusulas suelo volvería a estar en vigor.
Estas dos entidades son, junto a Novagalicia Banco, las más afectadas por la sentencia del Tribunal Constitucional, que establecía que la banca estaba obligada a advertir de forma clara y directa a los clientes que vayan a firmar una hipoteca de que existe la cláusula suelo y de que no podrán beneficiarse de determinadas bajadas del euríbor, ya que tiene un tope del que no se podrá bajar nunca. Debía retirarse automáticamente a todos los clientes, incluso aunque estos hubieran disfrutado de alguna bajada de euríbor o el notario les hubiera explicado en qué consistía la cláusula suelo.