El ex vicepresidente del Gobierno con Felipe González y ex presidente de Caixa Catalunya, declara este lunes como imputado en un delito de Administración Ilegal durante el tiempo que estuvo al frente de esta entidad. La Fiscalía denuncia los incrementos salariales que se aplicaron los directivos a pesar de la “situación crítica” en la que se hallaba la Caixa, tanto él como Adolf Todó: Serra, entre otras retribuciones, recibió más de un millón de euros entre 2007 y 2010, apenas cuatro veces menos que Todó durante el tiempo que estuvo en la ‘caixa’.
Esta comparecencia forma parte de la decisión de la Audiencia Nacional de abrir una investigación a Catalunya Banc por la venta de “productos tóxicos” y supone que este tribunal tenga ya causas abiertas con todas las entidades nacionalizadas, salvo la andaluza Cajasur.
El juez Fernando Andreu debe investigar, por orden de la sala de lo penal de la Audiencia, una querella de la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) contra el Consejo de Administración de la entidad —la antigua Caixa Catalunya, que hoy opera con la marca comercial CatalunyaCaixa— por delitos de estafa y apropiación indebida. Los “productos tóxicos” citados en la querella son swaps, participaciones preferentes, deuda subordinada y cláusulas suelo, que muchos clientes de Catalunya Banc adquirieron “guiados o aconsejados por los comerciales o directores de las sucursales”, según el tribunal.