El ex presidente de Pescanova solicitó 15 millones de euros a varios miembros del consejo de administración de la empresa el 25 de febrero, dos días antes de acordar la presentación del concurso de acreedores, por problemas “inminentes de tesorería” de la multinacional – que hay que recordar , se encuentra en quiebra técnica con un agujero de 900 millones de euros y una deuda de 3.000 millones más-.
El representante de Damm en el consejo, José Carceller, que prestó declaración ante el juez en calidad de testigo, ha explicado que en la reunión del consejo del 25 de febrero, en la que estaban presentes Manuel Fernández Sousa, José Antonio Pérez-Nievas, Paz Andrade, y los representantes de Luxempart y Damm, el entonces presidente de la pesquera les informó que la compañía precisaba 15 millones de euros “inminentes” para la tesorería, que sería una cuota del préstamo sindicado de 150 millones.
Canceller añadió que Fernández Sousa les solicitó 50 millones de euros para marzo, al tiempo que les explicaba que él había prestado ya 16 millones a la pesquera. El representante de Damm ha señalado que Sousa nunca aportaba documentos por escrito y siempre llevaba el borrador de las cuentas, que son las que presentaba en el consejo, pero que retiró y no fueron firmados ni por la cervecera, ni por Pérez-Nievas ni Luxempart.
A los dos días, el consejo de Pescanova volvió a reunirse y decidió por “unanimidad” la solicitud del preconcurso de acreedores.
