El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española– que abandona su puesto este mes- ha asegurado en referencia a la Reforma de la Ley del Aborto que, aunque la tutela adecuada del derecho a la vida de los no nacidos es “fundamental para cualquier sociedad”, esta materia “no es contemplada directamente por los acuerdos [entre Iglesia y Estado]” y, por este motivo, “las autoridades públicas no tienen la obligación legal de conversar con la Iglesia sobre la regulación jurídica de la misma”.
Este es el mismo monseñor Juan Antonio Martínez Camino es el que en su día apoyó, y asistió a las manifestaciones contra el aborto, eso sí, cuando el Gobierno estaba presidido por Zapatero, manifestaciones que la Conferencia Episcopal no ha vuelto a convocar o secundar desde que Mariano Rajoy llegó a La Moncloa, hace ya dos años.
Martínez Camino subraya que la Iglesia “desea que la reforma de la legislación sobre el aborto proteja el derecho a la vida de los que van a nacer de modo proporcional al bien que está en juego” y cree que “nunca puede ser considerado como un supuesto derecho como, por desgracia, sucede en la legislación vigente”.