Miles de personas atendieron el llamamiento de Plataforma 25-S y se manifestaron esta sábado en Madrid en los alrededores de Congreso de los Diputados que estaba ‘tomado’, literalmente, por más de mil agentes de policía. La protesta empezó pasadas las 8 de la tarde cuando los manifestantes han iniciado una marcha en dirección a la Plaza de Cibeles para tratar de rodear la Cámara Baja para denunciar la “ley mordaza del Gobierno”, en referencia a la nueva Ley de Seguridad Ciudadana, que contempla sanciones administrativas de hasta 600.000 € por acciones que hasta ahora eran contempladas por el Código Penal, de manera que ya no será un juez, sino la denuncia de un policía, la que decida a quién se multa, de manera que para recurrir dichas sanciones será necesario recurrir, como última instancia, a la vía administrativa, lo cual no evitará que, con anterioridad, tengan que pagarse.
Los asistentes estaban encabezados por una gran pancarta en la que se podía leer ‘No pasarán. El fascismo quiere amordazar al pueblo. Madrid será la tumba del fascismo’. A su llegada a Cibeles, la marcha improvisada-totalmente pacífica- ha subido por la calle Alcalá, en dirección a la Puerta del Sol, lo que ha provocado el corte del tráfico también en esta zona.
Tras su paso por Sol, la marcha ha continuado por la calle Carretas y después por la calle Atocha, donde finalmente se han producido las primeras cargas policiales y algunos asistentes, que se han ido separando del grupo principal, han comenzado a arrojar objetos a los antidisturbios.
“La voz del pueblo no es ilegal”, han gritaron los concentrados en alusión a que la protesta no se ha comunicado oficialmente-aunque sí estaba convocada en las redes sociales– a la Delegación de Gobierno en Madrid, su titular, Cristina Cifuentes, advirtió el viernes de que se trata de una “convocatoria ilegal” al no haber sido comunicada por los cauces oficiales, y aseguró que la Policía Nacional “actuará en defensa de la legalidad y evitará que pueda haber cualquier tipo de incidentes violentos”.
Fue ya al final de la concentración, y por grupos que se han ido desgajando del principal, cuando se han producido los disturbios más graves, que han acabado con, al menos 23 heridos leves, que han sido atendidos por el personal del Samur. La Delegación del Gobierno ha confirmado que han sido detenidas 23 personas, por distintos altercados y que este mismo domingo pasarán a disposición judicial.