La comparecencia del arzobispo Tomasi es histórica, por primera vez, el Vaticano afirma ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que existen abusos sexuales a menores cometidos por sacerdotes a nivel mundial. Frente a los casos comprobados bajo custodia o influencia de clérigos, la posición de las autoridades de la Iglesia ha sido que, cuando se comprueba la comisión de un crimen, éste debe ser castigado aplicando las leyes del Estado donde ha sucedido.
El representante del Vaticano recordó la extrema gravedad del problema, según el Informe sobre Violencia Contra Niños de Naciones Unidas, publicado en 2006, se presentan las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), 150 millones de mujeres menores y 73 millones de varones sin cumplir los 18 años han sufrido «experiencias sexuales forzadas». A ello se añaden decenas de millones de niños en trabajo esclavo, soldados forzados y víctimas del tráfico de personas.
En la misión de regeneración y transparencia de la Santa Sede, el pontífice Francisco ha decidido cambiar a cuatro de los cinco miembros que componen la comisión de control del Instituto para las Obras de Religión (IOR), el organismo que se encarga de supervisar al banco vaticano e informa directamente al Papa.