Al menos 33 personas fallecieron en una serie de explosiones cerca de la Zona Verde, el espacio considerado más seguro de Bagdad, que alberga las sedes del Gobierno y el Parlamento iraquí, además de las embajadas.
Una de las detonaciones ha tenido lugar frente de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Según los funcionarios de seguridad, el suceso se produjo mediante un coche bomba. El segundo ataque fue realizado por un terrorista suicida en un restaurante y el tercero por un vehículo con explosivos en un mercado de piezas de automóviles. Una bomba a mayores ha sido desactivada cerca de la sede del Ministerio del Petróleo.
Desde comienzos de 2013 la capital de Irak sufre una espiral de violencia que se ha cobrado más de 1.000 vidas. Por la tarde, otros tres coches bomba han estallado en el sureste de Bagdad, más un ataque con cohetes en la céntrica calle Haifa.
Al terrorismo del día de hoy, se le añaden otros cuatro atentados en mercados populares de Bagdad hace dos días. La revuelta de los islamistas suní han incrementado la tensión en el país.