Las precipitaciones toman un descanso y hasta las 8 de la tarde no está previsto su regreso. Por provincias las temperaturas máximas partirán en 13º en Lugo y ascendiendo a los 15º en Pontevedra y Vigo, hasta los 16º en A Coruña y Ourense. Aumentarán especialmente las cuotas mínimas.
El recibimiento de San Valentín será pasado por agua. Los enamorados deberán discurrir propuestas alternativas al aire libre pues se esperan que la borrasca comience a dar señales de vida a partir de la madrugada del viernes. Se esperan vientos muy fuertes y lluvias generalizadas e intensas durante la tarde. La alerta naranja traerá consigo ventiscas que podrán superar los 100 km por hora.
En cuanto al mar se mantiene el fuerte oleaje en las costas gallegas, que permanecerá activo hasta el fin de semana. Para mañana la alerta naranja en ondas comenzará al medio día en el litoral de Pontevedra y 3 horas más tarde en el noroeste de A Coruña.