1.000 partidos más para Gasol

Pau es la única estrella que brilla en los peores Lakers de los últimos 50 años. Pese a que el equipo- al que Mike D’Antoni ha transformado en una caricatura que ocupa el último puesto de su conferencia- perdió 125-131 contra los Pelicans, Gasol hizo un partido soberbio, con un nuevo ‘doble-doble’, gracias a sus 29 puntos –su mejor anotación de toda la temporada- y 12 rebotes, además, el catalán anotó 10 de los 15 tiros que intentó y marcó los 13 primeros puntos de Los Angeles.

Este buen momento coincide con su partido 1.000 en la NBA- lo que le convierte en el sexto europeo que más encuentros ha disputado en la liga profesional americana– con el fin de la tortura a la que le ha sometido el mediocre D’Antoni, quien ha hecho de un reciente campeón del campeonato un conjunto menos que mediocre al que los Nueva Orleans Pelicans metieron más de 65 puntos en cada mitad.

El buen momento de Gasol coincide, además, con la última temporada de su contrato con los Lakers: la temporada próxima será ‘agente libre’ y podrá elegir dónde jugar sin tener que estar ni a los caprichos de un manager al que no solo este equipo, sino esta liga, le viene demasiado grande, ni a las de los dueños de la franquicia que, los dos últimos años, han alimentado los rumores sobre la marcha de Gasol apostando por operaciones en las que el club ha quedado completamente devaluado.