Es verdad que es un circuito para Mercedes- todos lo son, a la vista de la diferencia que tiene sobre todo el mundo– pero la realidad es que en Barein las alarmas han tenido que hacer pitar los oídos a los jefes de Ferrari.
El coche no ha evolucionado como se anunció. Delante de él están- al margen de los de Hamilton y Rosberg- los Red Bull- pese a los problemas inauditos de Vettel, que no pasó a la Q3, los Willians, los Force India -con la sorpresa de la eliminación de Hulkemberg-y los McLaren. Además, encima de eso, en la escudería solo Fernando Alonso mantiene el tipo, porque de Raikkonen no se sabe nada más que lo que dicen los miembros de Ferrari que participan en la retransmisión: que no está completamente satisfecho con el coche, algo que prueba que hasta el último segundo haya podido quedarse fuera la clasificación en la segunda tanda.
Con este panorama, la realidad se ha impuesto en la clasificación de este sábado que ha decidido las posiciones en las que empezarán la carrera este domingo: Alonso saldrá 9º, por detrás de todos los anteriores, con los dos Mercedes en los primeros puestos- Rosberg 1º y Hamilton, 2º y Ricciardo 3º. Por detrás de ellos estarán Bottas, Sergio Pérez, Raikkonen, Button,Massa y Magnussen, aunque todos subirán un puesto por la sanción de Ricciardo que pierde 10 puestos.