El 91 % del volumen y 84 % del área total de los glaciares se ubican en la Antártida. El veloz deshielo conlleva a la aniquilación vertiginosa de sus bloques helados fundiéndose en el mar, según advierte la agencia espacial estadounidense de la NASA. Los investigadores han localizado los espacios de conexión entre los glaciares y la tierra para concretar la velocidad de su caída al medio líquido.
La investigación destaca, que a partir de los 40 años los glaciares de la Antártida occidental “pasarán al punto de no retorno” declara el experto glaciólogo, Eric Rignot, de la Universidad de California en Irvine. La descongelación contribuye a incrementar el nivel del mar en 1,2 metros globalmente, tesis publicada en la revista Geophysical Research Letters.
La fulminación de los bloques de hielo se debe a su velocidad de flujo, la cantidad flotante en el agua, la pendiente y la profundidad bajo el nivel del mar. El estudio señala que los glaciares realizan movimientos horizontales cuando fluyen aguas abajo, sin embargo las partes flotantes realizan movimientos verticales al cambiar mareas.