A.A.V. ha tenido que esperar 76 días para que le llamaran desde el el Servizo Galego de Saúde (Sergas) para decirle-de palabra, no por escrito- que no le suministrarían el tratamiento contra el cáncer gastrointestinal que padece. Dicho tratamiento fue prescrito por su oncólogo pese a lo cual el Sergas le ha dicho que el medicamento aún no está homologado.
En estos 76 días, el estado de salud de A.A.V. se ha agravado con la aparición de nuevas complicaciones en el aparato digestivo que podrían haberse tratado con el mencionado medicamento y que este paciente cree que no se le ha suministrado por el precio que tiene: le costaría 3.000 € al mes a la sanidad pública, un gasto que, en su opinión, a causa de los recortes, el Servizo Galego de Saúde no quiere asumir.
Mientras sus posibilidades de curación se reducen, este enfermo de cáncer ha enviado varias cartas al Sergas a fin de que le comuniquen, por escrito, los motivos por los cuales le niegan un tratamiento que sí ha sido efectivo en contra este tipo de cáncer…pero nadie le ha contestado.
