Mark Simpson es un creador en potencia, su mente no conoce límites y se ha aventurado a expandir una nueva tendencia masculina, el spornosexual. El término, que proviene de sports más porno, define a los amantes de los músculos definidos, con esta nueva etiqueta pretende descartar su anterior invención, el hombre metrosexual, que cumplía 20 años en expansión.
La evolución en las tendencias se centra según Mark, en ser “deseable por el cuerpo, no por su armario y mucho menos por su cabeza“. Se trata de una persona que cuida su aspecto físico en mayor medida que el metrosexual, le apasionan los selfies con escasa ropa mostrando sus músculos, tatuajes y piercings, principalmente frente a un espejo.
El nuevo narcisismo viaja por mandato en las redes sociales, creando aliados en Instagram o Facebook. El creador del término indica que “en el gimnasio convierten su cuerpo en una mercancía excitante que comparten y comparan“. Enamorados de sí mismos, sin miedo a sentirse halagos sin medida.