Casi un mes después de que el primer ministro Netanyahu- con el apoyo del presidente Obama- ordenase la devastación de Gaza, el Gobierno español ha congelado las autorizaciones de venta de armas a Israel, una decisión que el Ejecutivo volverá a analizar en septiembre para decidir si la prorroga.
Esta ‘congelación’ no afecta a las ventas anteriores a este mes de agosto –eso quiere decir que España siguió vendiendo armas al Ejército israelí durante la masacre en Gaza, en la que han muerto más de 1.800 personas, más del 80% civiles, incluidos más de 400 niños menores de 16 años-.
España vendió el año pasado al Estado de Israel material de defensa por valor de casi 4,9 millones de euros, lo que supone en torno a un 87% más con respecto a las exportaciones de este material en 2012 y la mayor exportación de los últimos cinco años –eso sí, muy lejos de los 300 millones en ventas que autorizó, hace apenas dos semanas, el Premio Nobel de la Paz, Barack Obama-.
¿Y qué es lo que vendemos al Ejército de Israel?…pues el Gobierno autorizó, principalmente, la exportación de bombas, cohetes, torpedos, misiles, granadas o cargas de demolición. Hay que recordar que el actual ministro de Defensa, Pedro Morenés, fue consejero y representante de la empresa Instalaza S.A., fabricante de bombas de racimo, y director ejecutivo en España de la empresa paneuropea de misiles MBDA.