Pauline Hickson y ha vivido en siete residencias diferentes para intentar huir de un perverso fantasma. Esta británica de 58 años ha sido víctima de un espíritu que se obsesionó con ella de tal manera que le robaba su ropa interior. “Llegaba a casa del trabajo y encontraba toda mi ropa interior revuelta sobre la cama. Con el tiempo, me di cuenta de que mis bragas y sujetadores iban desapareciendo. También noté que alguien se metía en mi ducha, porque todas las ventanas se empañaban y el baño quedaba todo mojado”.
Aunque, en principio pensó que era una broma de su familia, la realidad es que estos ‘estremecedores’ sucesos, que empezaron dos años atrás, cuando se fue a vivir a la localidad de Hull, lejos de disminuir, aumentaron, hasta el punto de que la pobre Pauline tuvo que irse a un hotel cercano “porque estaba demasiado asustada para volver a casa”.
Fue entonces cuando empezaron las mudanzas, primero a Cambridge, luego de vuelta a Hull…hasta que harta, decidió buscar un ‘cazafantasmas’, según relata el Daily Express…y funcionó- recordamos que siempre la versión de Pauline- puesto que desde entonces no ha vuelto a echar en falta su ropa interior y puede ducharse con total tranquilidad sin tener la sensación de que la observan.