El 1 de septiembre, Ángeles Fernández de 61 años deberá abandonar su domicilio en Vigo. El desahucio se produce ante las dificultades de poder costear el pago de su vivienda de alquiler de 330 euros. Con problemas de salud sumado a las dificultades al caminar, la afectada ha recorrido diversos organismos para encontrar una posible solución.
Hace meses, Ángeles fue atendida por el alcalde de la ciudad, Abel Caballero, en varios medios de comunicación, recibiendo por su parte el apoyo necesario para salir de la problemática, sin embargo las buenas intenciones se han difuminado. “Me atendió en Localia y en la radio, pero ahora ni me contesta a las cartas en las que solicito una reunión para poder mostrarle los documentos“, declara la afectada, cuya cuenta atrás hacia el desalojo se hace inminente.
La mujer ha informado de su desahucio a la Xunta, la cual le ha contestado que no dispone de solución al respecto. Beneficiaria del régimen Aluga, podía costear el alquiler con su pensión, expirado el plazo máximo del programa, Ángeles busca un alquiler social al que poder hacer frente.