Aumenta la tensión en la localidad de Saint Louis (Misuri), tras la segunda muerte de un joven afroamericano por los disparos de la Policía. El fallecido de 23 años, participaba en las protestas por la muerte de un adolescente negro, Michael Brown, tiroteado por un agente cerca de Ferguson el pasado 9 de agosto, según informa la CNN.
El jefe de la Policía de Saint Louis, Sam Dotson, relata que “el sospechoso caminaba hacia ellos con las manos en la cintura, luego sacó un cuchillo y les dijo disparadme, matadme ahora”. Ante su negativa para guardar el objeto, los agentes abrieron fuego por la proximidad del individuo. Dotson añade, que el joven había realizado un robo horas antes en un supermercado.
Se trata del décimo día de protestas que surgieron con la muerte de Michael Brown de 18 años, al ser tiroteado por el agente Darren Wilson por una discusión cuyo contenido se desconoce. La autopsia del joven fue ejecutada por el forense Michael Baden, el mismo profesional de casos como Martin Luther King y John F. Kennedy.
