Reconocida la importancia de la vitamina C de la naranja, parece que el exceso del zumo de la fruta puede perjudicar a la salud, según un estudio del Instituto Argentino de Alimentos y Nutrición (IAAN). Un vaso de zumo contendría un 10% de la fibra total que posee el cítrico, perdiendo sus propiedades hasta un 80%, cuanto más tiempo transcurra sin ingerirse.
El fundador de la institución, Alberto Cormilot, señala que al contener fructosa, no estimula como debe a la insulina. Asimismo, el jugo puede provocar diabetes, aumentar el peso corporal por la formación de la grasa; y perjudicar a los oídos, órganos que indican los daños en el sistema de circulación.
El estudio para no excederse con los líquidos de los cítricos, aparecen publicados en la revista Clinical Journal of the American Society of Nephrology. Los profesionales señalan que el consumo moderado es beneficioso para el aparato digestivo y urinario, en la recuperación de enfermedades y en los tratamientos antienvejecimiento.