Ser optimista alarga la esperanza de vida más que reducir el colesterol y controlar el tabaquismo. Quien lo asegura es el profesor, José Antonio Florez Sánchez, catedrático de Ciencias de la Conducta de la Universidad de Oviedo. En una intervención en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), el profesor Flórez ha recalcado que las personas más optimistas tienen menos enfermedades, y cree que es así porque “se cuidan más, porque aprecian y valoran lo más importante y que ignoramos todos, que es la vida”.
Las personas más felices “viven cinco años más” que quienes no lo son. A la hora de concretar qué es la felicidad, el profesor ha recalcado que lo importante no es definirla, “sino sentirla”. Flórez cree que la risa es clave para enfrentarnos a la vida, como parte de algo que no puede enseñarse: aprender a vivir. Incluso ha señalado lo fundamental de este ‘aprendizaje’: “descubrir lo mejor que tenemos cada uno de nosotros y aprender de los demás”.